Como poner a punto tu vehículo de cara al mal tiempo
La entrada del otoño es el momento ideal para la puesta a punto de los automóviles de cara al mal tiempo.
El frío y las lluvias hacen que las condiciones de conducción no sean las mismas que en épocas de buen tiempo. Con el frío, algunas de las piezas de goma pierden elasticidad, por lo que las correas de distribución y servicio pueden verse afectadas; la batería pierde capacidad para suministrar corriente; en los motores diésel, los calentadores pueden no tener un funcionamiento adecuado, etc.
El frío y las heladas afectan al estado de conservación de los elementos de nuestro vehículo.
Respecto a la lluvia, no es lo mismo conducir sobre un asfalto mojado que seco. Aquí, el buen estado de los neumáticos, de las pastillas de freno o de las escobillas es importante para mantener la seguridad.
Por esa misma razon Auto Bribón, hemos decidido añadir una nueva entrada a nuestro Blog explicando algunas recomendaciones sobre el estado en el que deben estar algunos componentes de tu vehículo para evitar sustos este invierno.
Batería: El frío provoca que la batería se descargue, por ello conviene analizar el estado de la misma en el taller como mínimo, al tercer año de vida de la misma. De su buen estado depende el correcto funcionamiento de todos los componentes electrónicos (sistemas de abordo, control de tracción, estabilidad, dirección, ABS…), así como de los componentes eléctricos (faros, alarma, gps, radio…).
Para determinar el estado de la batería debemos prestar atención al tiempo de arranque y al ruido.
Suspensión: Una suspensión en buen estado proporciona un mejor comportamiento del vehículo, una mayor estabilidad y una adecuada capacidad de frenada, de modo que la revisión de los amortiguadores debe hacerse cada 30.000 km.
Un incorrecto mantenimiento de la suspensión aumenta la distancia de frenado hasta un 35 por ciento, además de poder provocar la pérdida del control de la dirección o sufrir aquaplaning. Por otro lado, también aumenta el desgaste del resto de las piezas (rótulas, soportes, neumáticos…), por lo que se recomienda cambiarlos entre los 65.000 y los 90.000 km y que el cambio se realice por completo o por ejes (de dos en dos).
Frenos: Los discos de freno se recomienda revisarlos cada 20.000 km y antes de largos desplazamientos, prestando atención al estado de los discos. Al cambiarlos, se deben cambiar también las pastillas y los latiguillos, y hacerlo por eje, para asegurar una frenada equilibrada que garantice la estabilidad del vehículo.
En el caso del freno de tambor, debe sustituirse cuando esté deformado, con ranuras profundas o cuando su diámetro interno esté cercano al máximo indicado por el fabricante. Al hacerlo, habría que cambiar todos los elementos que sufren desgaste: cilindros de ruedas, zapatas, tensor automático, muelles y seguros.
Por su parte, las pastillas de freno han de tener un grosor mínimo de 2 mm., y el líquido de frenos hay que cambiarlo, bien cada dos años, bien entre los 40.000 y los 60.000 km.
Filtros y aceite: El buen estado de los filtros es importante para que los fluidos que entran el motor lo hagan completamente limpios. El filtro del aceite suele cambiarse cada dos años, y el de combustible, cada uno o dos años. Para el cambio del aceite, lo más conveniente es hacerlo cada dos años o entre los 5.000 y los 30.000 km.
Asimismo, se recomienda fijarse en la calidad de los filtros para una mayor protección del motor.
Limpiaparabrisas: Las escobillas son un elemento clave del limpiaparabrisas, por lo que debemos vigilar que no dejen rastros de agua o marcas sobre el parabrisas, así como que no hagan ruido. Conviene cambiarlas cada año, coincidiendo con el otoño.
En las escobillas es fundamental un diseño del conector de la escobilla que asegure perfectamente su sujeción y que evite que se suelte.
Estos son nuestros consejos para cuidar vuestro vehículo durante este otoño-invierno.
Y por eso mismo, si vienen a nuestro Taller en Auto Bribón y utilizan EL SIGUIENTE CUPÓN, tendran GRATIS un control estandar de su vehículo.